domingo, 24 de mayo de 2009

Elsa, sigues malita, estás en casa, pero cargada de medicación, cada pocas horas te toca una cosa u otra, y las noches están siendo muy duras, sobretodo para ti, que no te encuentras muy bien.
En unos días te ve el neumólogo, tienes un pulmón un poco manchado, principio de neumonía, pero, mira, aunque no me sirvan por ahora para trabajar, mis estudios de auxiliar enfermería si me sirven para cuidarte, ¿ves?estoy contentísima, porque me entero muy bien de tus diagnósticos y del plan de actuación, me tomo la serenidad necesaria ante una crisis (incluso cuando Ramón convulsionó, lo traté con mucha calma, y creo que es lo mejor ante un grave problema con alguien con quien quieres, como con vosotros por ejemplo, actúar temblando como una madre, pero al mismo tiempo como una persona con templanza que ha trabajado con enfermos de todo tipo en una UCI, y en una unidad de infantil... y ahí uno se da cuenta que el saber no ocupa lugar, y la formación de uno mismo, es un gran regalo y homenaje que nos damos)...

Bueno, no escribo más, porque ahora me necesaitais, y lo primero es lo primero: daros la atención, los cuidados y el cariño que requereis, y luego, si hay tiempo, ya escribiremos otro ratito...

No hay comentarios:

Publicar un comentario